Ni en tiempos de COVID - 19 las estaciones pararon
ni el amor dejó de florecer.
Los bebés no dejaron de nacer
ni cada hora el reloj dejó de sonar
A pesar del temor y del horror
el mundo no dejó de soñar
Te amo igual o incluso más,
el calendario no esperó,
el cambio a todos tocó.
En lo personal gracias doy
por nuevo camino voy
tan feliz y tan completa
que hoy sin duda alguna sé
que de Dios este regalo es.
Entre los mil nombres desconocidos
enlisto gente querida
la última vez, en verdad que lo fue
sin aviso, sin advertencia ni sospecha
así para tantos
por los míos lloro
y por todos oro.